“La guerra de la
independencia venezolana –incluyendo la de Gran Colombia y, por extensión, Perú
y Bolivia – no fue sólo una guerra civil de independencia, ni una guerra
internacional, como apuntan, han escrito y sostenido escritores, historiadores,
políticos, sociólogos y militares”.
En tales términos
escribió el fallecido historiador barinés, Fidel Betancourt Martínez al
referirse a la independencia que lideró nuestro Libertador Simón Bolívar en
nuestras tierras. A lo anterior, el historiador añadiría que “A nuestro
juicio, estudio y observación, la lucha de independencia tuvo un carácter
mixto, el cual se desarrolla en tres fases o caracterizaciones:
-De 1811 a 1815, tuvo carácter
civil o fratricida, hasta el desembarco en Margarita del general Pablo Morillo
en 1815, con tropas de la península Ibérica.
-De 1816 a 1820, fue de carácter
interno intestino evidenciado en los acontecimientos del primer gobierno
de Angostura-Bogotá, el cual representa el comienzo de la destrucción de los
españoles de Nueva Granada, el armisticio. Regulación y derogación de la guerra
a muerte, hasta el 25-27 de noviembre de 1820 en Santa Ana de Trujillo.
-De 1821 a 1826 de carácter
internacional, desde el rompimiento de las hostilidades en abril de 1821,
pasando por la Batalla
de Carabobo, el 24 de junio de 1821, la caída y toma de Puerto Cabello, la
capitulación final del resto del poderío español en Maracaibo y Coro, últimos
baluartes del poderío español en Venezuela , y de aquí hasta la Batalla de Ayacucho, el 9
de diciembre de 1824, la cual terminó con el poderío español en el sur, no
obstante la heroica o inútil resistencia del comandante Rodil en El Callao,
Perú, hasta el 23 de enero de 1826”
.
Tal descripción
la hizo este historiador autodidacta, quien sobre su trabajo de la Historia Militar
de Venezuela- dijo:
“No escribo para académicos ni para los que no
necesitan por su saber, y que podrían ser mis maestros; de éstos sólo espero
comprensión y equidad en sus juicios”.
Y más de su
opinión:
“He escrito en silencio secreto de asceta cristiano
primitivo y de unción hindú en Rajagriba; sin exhibicionismos, sin apelar a
ayudas intelectuales o económicas, políticas o personales, para producir una
obra libre de influencias de cualquier género, libremente, como en la ilimite
llanura el potro cerril de nuestro Escudo”.
Interesante saber
que este historiador no académico, como el mismo lo señaló, produjo 12
volúmenes, a lo que hay que añadirle 88 planos descriptivos de las acciones
militares más importantes que describió, todo ello producido en 50 años de
trabajo entre los años 1925 y 1975, todo ello barnizado por una vida altamente
dinámica que transcurrió entre “revoluciones y exilio, actividad periodística e
investigaciones históricas…” Este notable hombre se dedicó por entero a
investigar por su cuenta, no buscó ningún tipo de ayuda, ni perteneció a
partido político, sectores religiosos, descartó los compadrazgos, ni
amiguismos, ni dispuso de tiempo para formalismos sociales, un hombre dedicado
a la búsqueda de la verdad de nuestra historia militar.
Tropas venezolanas en las fuerzas
españolas dejadas por Morillo
Escribe Fidel
Betancourt en el Tomo II (Independencia-1810-1830) que había que tener presente
que para los años 1821-1823, en aquellas batallas definitivas de Carabobo y
Maracaibo, “existían tropas venezolanas , veteranas, de primera línea y en
cantidad, en las fuerzas españolas dejadas por Morillo; así como había
granadinos realistas desde el desembarco y toma por Morillo de Cartagena y
Bogotá hasta la dominación del Virreinato en Boyacá; así como también
hubo en gran cantidad hasta Junín, Ayacucho y en Alto Perú (Bolivia) tropas
criollas, realistas, en las tropas españolas”.
Al referirse al
carácter de la guerra, el historiador apela a otro historiador J. Gil Fortoul y
refiere que en el prefación de la Historia Constitucional
de Venezuela, anotaba: “Ilusión, ver en la Independencia una
guerra civil, cuando evidentemente fue una guerra internacional, de la nueva
nacionalidad americana. aunque todavía en formación, contra la nacionalidad (…)
monarquía española”.
Por supuesto
Fidel Betancourt M. no aceptó ese concepto porque para él, estaba reñido con la
realidad y reiteraba que sostenía su tesis expuesta, que consideraba justa y
luego añade: -En su mensaje del 2 de diciembre de 1817, el presidente Monroe
dijo al Congreso americano que “la unión miraba la Guerra de Independencia no
como una rebelión o una insurrección ordinaria sino como una guerra civil entre
los contendientes…”. También este historiador echa mano de la Biografía del general
José Félix Ribas, escrita por Juan Vicente González, quien cita al español José
María Blanco White y quien habría dicho “No cesaré, no –gritaba el29 de abril
de 1816-, en todas partes me hallarán diciendo lo mismo. El gobierno español es
responsable a Dios y a los hombres de los horrores que están develando las
Américas. La guerra civil crece y se enfurece cada día más”.
Los realistas venezolanos
Según escribe
Fidel Betancourt en la
Historia Militar de Venezuela, el 24 de junio de 1824, en las
propias tierras de Carabobo, el ejército realista tenía “…más de 5.000 hombres
y llegaba a 6.000, según otros autores”. Sin embargo en los batallones
Valencey, Infante, los regimientos del Rey y el de Guías así como en los
diversos escuadrones españoles había 2 mil venezolanos.
De modo que, si
el ejército realista era de 5.000 hombres, un 40 por ciento lo formaban
venezolanos y si los hombres sumaban 6.000, de ese ejército, entonces 33,3 eran
venezolanos. Otro aspecto de la historia nos lo refresca el historiador, al
decir que era bueno recordar que antes de que iniciara la ofensiva de los
patriotas de 1821 hacia la región carabobeña, se vinieron a las fuerzas
patriotas los altamente conocidos y renombrados realistas venezolanos Remigio
Ramos y Reyes Vargas, asunto que habría generado desconcierto entre los jefes
militares españoles que no sabían qué hacer.
Guerra a muerte entre venezolanos
Comenta el
historiador que “Se ha acusado a Bolívar de criminoso y sin objetivo favorable
a la independencia por la declaratoria de la guerra a muerte; basados en
que el mismo Bolívar comprendió su error luego, reconociendo que la guerra fue
entre venezolanos, aún hasta 1819-1821. Las represalias eran entre criollos y
pocas veces contra españoles puros o canarios. En verdad, fueron los españoles
y criollos realistas los que iniciaron y fortalecieron la lucha a muerte,
pasando por las armas y asesinando patriotas vencidos o familiares de éstos,
desde los sucesos de Gual y España antes de 1.800, a tal punto que hombres
de cultura y nobleza llegaron a extremos graves que se puede afirmar que fue
esta razón y sentimiento general lo que produjo el terrible decreto
expedido en Santa Ana de Trujillo el año 13 y no obra exclusiva de Bolívar,
aunque esa misma hubiese sido su opinión.
1 comentario:
Interesante. No había oído hablar de Fidel Betancoourt
Tal vez podráin ser distorsiones, pero la guerra fue entre una colonia y sus colonizados.
Lo invito a leer
http://www.laleyendadeldorado.blogspot.com
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