Pedro Estacio
En este siglo es imposible seguir con la farsa humanidad con la que se ha vendido Europa, intentando decirle al resto del planeta que ellos son los mejores, los desarrollados y los demás somos gentiles, algo menos que humanos, como piensan en voz alta la Derecha extrema de Ucrania y la Derecha extrema Judía en Israel, mientras en voz baja y tras las cortinas lo hacen los judíos ingleses, estadounidenses y demás anglosajones, sin olvidar que han tenido sus narices metidas en este nuevo mundo americano y en África.
No olvidemos que las casas que dominaron en Europa -en el tiempo del absurdo absolutismo- llenaron ese continente de intrigas y violencia, de unos contra otros y de lo que no escaparon España, Portugal, Inglaterra, Holanda, austroalemanes y pare de contar.
Las coronas iban de un lado a otro, lo mismo que las traiciones y demás acciones violentas, de modo que no debe extrañarnos las conductas de los involucrados que siguen igual pero con otros actores y diferentes metodologías pero con el objetivo escondido del despojo y siempre para dejar establecido que ellos se piensan mejores que los demás.
Como no leemos como deberíamos -nos dejamos llevar por otras cosas, como las banalidades y frivolidades de los medios de comunicación y el alboroto último de las redes, muy poco llegamos a comprender que el maestro del Libertador, Simón Rodríguez, estaba profundamente claro en que tanto europeos como Estados Unidos, han sido enemigos de la libertad de pensar en nuestra América.
¿Hay alguna diferencia entre lo que pensaba Simón Rodríguez antes y lo que sucede actualmente?
No lo hay, pero tenemos una cuadrilla de personas que, aunque los ejemplos los tengan en sus propias narices, insisten en ser como quienes se acostumbraron a sojuzgar a los demás.
El único camino válido para impedir todo tipo de vasallaje, incluyendo y destacando el peor de los sometimientos como es el mental, es educar profundamente a los habitantes de Venezuela, con una insuperable excelencia técnica y una inigualable formación humanística de alto nivel, lo cual nada tiene que ver con los mensajes tontos en las redes, tampoco los selfies y mucho menos las frivolidades de las plantas de televisión como pareciera indicar la existencia de personas alienadas.
Siempre será bueno recordar al maestro del Libertador de América Simón Bolívar y creer en lo que decía, que “La América está llamada, si los que la gobiernan lo entienden, a ser el modelo de la buena sociedad, sin mas trabajo que adaptar”.
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