Sociedades Americanas en 1828

La juventud americana necesita abrir los ojos sobre su situación, y los niños tienen que aprender a leer. Los jóvenes que han de reemplazar a los padres de hoy, deben pensar y escribir mejor que sus abuelos, si quieren que en América haya patria y lengua. Esto no lo conseguirán con escrúpulos, ni con burlas, ni con puntitos de erudición.
Simón Rodríguez, en Sociedades Americanas en 1828



martes, 10 de mayo de 2011

Bolívar siempre supo la fuerza de la imprenta

Sobre Simón Bolívar es muy difícil que nos cansemos de escribir, porque ese gigante de América fue ampliamente dotado por la providencia, para asumir el rol que le correspondió vivir en su lucha por la transformación del país y del resto del continente.
Veamos lo que dice el periodista y profesor zuliano Ignacio de la Cruz, en la colección de ensayos y artículos que le publicó el Ministerio del Poder Popular para la Información y Comunicación en un libro titulado “Bolívar y su concepción del periodismo”:
“El examen de los diversos campos en que Bolívar despliega su creadora e insólita energía tiene que centrarse en hecho que lo define y lo caracteriza: el estar magistralmente dotado para practicar la política en forma total.
Y luego el profesor La Cruz adiciona que únicamente tal punto de vista es el que facilita explicar esas particularidades que tenía el pensamiento del Libertador en torno a la imprenta y el periodismo. Además, refiere que Para entenderlo, debe estudiarse: en su concepción iluminista, el compromiso de lucha con la independencia, su actuación en la vida republicana; y después de Ayacucho, en su vinculación con el esfuerzo por crear una nación de Repúblicas, frente a los recelos y maniobras de las oligarquías locales, en trance ya de ejercerse tiranía activa y doméstica.
Muy preciso en su comentario, Ignacio La Cruz escribió que el gran medio de la época en que se desenvolvió Bolívar, como lo fue la imprenta, estuvo ligado a toda su obra, de manera permanente y de hecho apela al historiador Manuel Pérez Vila quien en su obra Campañas periodísticas del Libertador, cita: “Es sabido que en 1810, cuando regresó de Londres, trajo consigo una imprenta”.
Argumenta luego que en el año de 1816, cuando organiza la expedición de Haití, el caraqueño no solo cuenta con las armas y dinero sino con una imprenta y se los proporciona la agudeza y solidaridad políticas de Petión. Posteriormente, dos años luego, nace de la mente del guerrero americano el Correo de Orinoco y como lo denomina otro historiador, José Gil Fortoul, El ariete intelectual de la empresa libertadora.
Otro intelectual, como lo fue el profesor Jesús Sanoja Hernández, consideró que nuestro Libertador tenía un gran sentido utilitario del periodismo y todo ello gracias a  la esclarecida conciencia que tenía sobre la importancia de la imprenta. Sabía Bolívar –consideró el profesor La Cruz- que la imprenta era un arma de devastadoras consecuencias psicológicas a su disposición. De allí su carta a Fernando Peñalver: Sobre todo mándeme Ud., de un modo u otro, la imprenta, que es tan útil como los pertrechos.
El periodista y profesor universitario acude al artículo ¿Bolívar, Periodista?, del  fallecido historiador Alfonso  Rumazo González para seguir desarrollando la idea y dice que era tal el interés y la fuerza que el libertador le asignaba a la imprenta que no hacia sus grandes campañas militares si no llevaba consigo una imprenta. No le bastaba la fundación de periódicos en tal o cual ciudad.
La importancia de los volantes y folletos
Conozcamos lo que escribió el desaparecido profesor de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela, UCV, Jesús Sanoja Hernández en la publicación Vigencia de Bolívar en el periodismo venezolano, editado por el Colegio Nacional de Periodistas, de Caracas, en 1982:
En el Alto Perú llevaba en la mula trasera la carga de una imprenta, del tamaño que fuese, e iba distribuyendo donde quiera en hojas volantes las impresiones. Sacó en esta etapa un periódico llamado El Centinela en Campaña, al tiempo que iba dejando, por ejemplo, en la ciudad de Trujillo en el Perú, un periódico que formalizaba la influencia en esa área. Aquel, que era un periodiquito, al ritmo de la marcha daba los resultados de las batallas, incluía las proclamas y así sucesivamente.
Registra Ignacio La Cruz, quien dirigió la Escuela de Periodismo de la Universidad del Zulia, una cita que hizo el también periodista José Ratto Ciarlo, del hispano-venezolano Pedro Grases sobre nuestro luchador americano:
Hasta su muerte, en 1830, el Libertador se sirvió de los impresos  en hojas volantes y folletos…lo cual nos da una idea bastante clara de cómo utilizó la imprenta para fines de la guerra o como medo de difusión de las ideas de libertad y de gobierno.
En otro aparte de su trabajo, el profesor Ignacio de la Cruz aborda el ítem de moral y luces al que el Libertador hacía siempre referencia y escribe que Por provenir de la Ilustración, Bolívar verá en la educación –moral y luces son nuestras primeras necesidades- el medio a través del cual el individuo, en cuanto ser de razón, es capaz de “adquirir un saber lo más amplio posible cuantitativamente, y lo más autónomo  y crítico cualitativamente, con el fin de utilizarlo para actuar técnicamente sobre la naturaleza, moral y políticamente sobre la sociedad”,(Lucien Golmann, en La Ilustración y la Sociedad Actual, Monte Ávila Editores, 1968) 
Refuerza lo que escribe el fallecido docente, al referir que El grado cada vez mayor de perfectibilidad humana –aquel infinito moral del que hablaba Simón Rodríguez- a que tiende y alienta  el proceso educativo, el cual se refleja y opera sobre las costumbres, produciría no sólo la estabilidad de las instituciones, sino su mejoramientoY Bolívar dirá en su Discurso de Angostura: “La perfección social es el único fin de las instituciones humanas”.   
 
 
 
DE LA CRUZ, Ignacio
Bolívar y su concepción del periodismo
Colección Análisis
Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información
2009