Una revolución es como un río

 

Pedro Estacio

No es fácil entender un proceso de transformación, porque sencillamente intervienen en el mismo miles de ideas y personas y no todos suelen estar de acuerdo; hay coincidencias, contradicciones, verdades, gente que miente, otros que se disfrazan, lealtades, deslealtades.

Todo proceso se ve, desde lo alto de una cima, como las aguas de un río que tranquilamente muestran su deslizar y sigue adelante, sin detenerse un instante ni un día con su noche. Así han sido filmados grandes y conocidos ríos como el Amazonas, Orinoco, Colorado, Nilo, el Amarillo, Misisipi, río Mecong y Ganges de La India, entre otros muy importantes, pero lo que muy pocos conocen son sus aguas interiores, es decir, el agua que cirre bajo la superficie.

En diversos lugares del mundo hemos podido apreciar eventos en los que hay personas que suelen internarse en las aguas. Lo han hecho porque les gusta y han mostrado que pueden desenvolverse en ellas. Hay quienes han cruzado a nado el Canal de La Mancha entre Francia e Inglaterra. Otros lo hacen por los lados del Orinoco y hay quienes en la isla Margarita, Nueva Esparta, nadan en el mar, trotan y montan en bicicleta, lo que llaman el Triatlon.

Y como para que no queden dudas de lo que el ser humano es capaz de hacer, tenemos a los campeones del Apnea, esa especialidad en la que se sumergen hasta mas de 100 metros sin respirar y donde nadadores muy bien preparados han durado su tiempo sin hacerlo.

Debo decir que he citado prácticamente ejemplos muy individuales y un proceso de transformación o una revolución suele tener un carácter colectivo, si bien es indispensable en el mismo un liderazgo que enamora, que convence con ideas al gran colectivo, que le vende con la práctica los proyectos de transformación y que le ayudará a alcanzar los objetivos que han sido planteados en el inicio de la revolución o transformación.

Pero así como los ríos tienen sus dificultades, muchas de ellas naturales, como las indetenibles lluvias, que les hacen aumentar sus caudales y ocasionar serios problemas en sembradíos y ciudades, al igual que los daños ocasionados por el hombre a sus fuentes naturales, así como la tala y la intervención de sus aguas, las revoluciones, los procesos de transformación también tienen sus enemigos.

Solo basta leer la historia y nos daremos cuenta que grandes procesos como las revoluciones pueden significar beneficios para los ciudadanos de un país y les permirte a sus habitantes ser independientes, libres, soberanos, formados educativamete, conscientes de su historia, dignidad y recursos,

No inventamos absolutamente nada y no es necesario porque los casos activos de estos días están en todos los medios del planeta como son los casos de Cuba con 60 años de agresiones, Irán con 40, Nicaragua que tuvo que hacer una guerra, recibir agresiones antes y después, Venezuela con un golpes de Estado, otros intentos de agresión, sin contar con las inmorales sanciones y robo de bienes.

Así como a muchos ríos los han desviado de sus cursos y han aprovechado sus ventajas y han obtenido beneficios de sus aguas, lo mismo han intentado hacer los imperios contra las revoluciones que hoy permanecen de pie y luchando para seguir sirviendo a sus pueblos.¡¡Siguen adelante como las aguas de los ríos!!