Ignorar la existencia de los demás no puede ser parte de la vida, quizá es tan solo una fantasía muy iluminada..
Pedro Estacio
No es un camino fácil el de la revolución bolivariana, pues tiene muchas ramas y cada una de ellas es una parte de ese árbol de las tres raíces que constituyen su base de sustentación y que tiene que ver con la inclusión y organización de las personas.
Solo incluir, de por si, invita a enumerar mucho como las conocidas con el nombre de Misiones y Grandes Misiones Socialistas, en las que se ha incluido a infinidad de personas.
Misiones al bate
Si hablamos de la educación, pues aquí la inclusión de personas de todas las edades llegó hasta dejar al país sin analfabetas y si nos metemos con el área de la salud, la primera que salió al bate fue la Misión Milagro que llevó a muchas personas a ser operadas de los ojos y a quienes devolvieron la vista. Esta misión, abrazada por médicos cubanos y venezolanos, hasta salió del país para hacer la misma tarea en otras naciones. Sus números son altos.
El aparte en este momento es para añadir que en la educación hubo una bifurcación que llevó a la inclusión de miles de estudiantes que los condujo a una efectiva participación política en el medio de los estudios de bachillerato y en las universidades.
Y aparecieron las batas
En salud la movida es mayor siempre. La la idea de Barrio Adentro, concebida por Hugo Chávez y Fidel Castro se extendió por toda la geografía y llevó médicos a sitios donde nunca habían visto una bata blanca y donde fueron atendidas, por primera vez, muchas personas y hasta se encontraron con las llamadas Salas de Rehabilitación Integral, centros donde la terapia es la tarea fundamental.
Y por ahí van andando otras misiones como Conadpi, relativa a las personas con discapacidad, Amor Mayor para personas muy necesitadas y de avanzada edad. Pero hay muchas otras vinculadas al deporte, las mascotas y el ambiente como la Misión Árbol, importantísima en este asunto del cambio climático.
No hay maneras de dejar afuera a la Misión Ciencia, que ha tenido un rol vital no solo en trabajar con la investigación para enfrentar la pandemia del coronavirus y las posibilidades que requieren de la ciencia, además de convertirse en el brazo armado de la producción y sustitución de partes y equipos tecnológicas
Pero si de inclusión se trata pues hay que hacer referencia al denominado Poder Popular, que es una de las últimas grandes misiones en proceso de organización y crecimiento, lo mismo que los Consejos de Trabajadores Productivos. Igualmente, están las motivadas organizaciones culturales regadas por todo el país, las cuales son apoyadas.
Un país que vibra
Hay toda una vibración política económica social en Venezuela, que solo es explicable al grado de exaltación de la conciencia y el espíritu que está en todos los ciudadanos nacidos en esta geografía así como aquellos que han tomado la tierra de Simón Bolívar como suya.
Hasta sucede lo que para otros es inexplicable, como es el retorno de los venezolanos, que manipulados por intereses centrados en el robo de recursos, la ambición del poder y control sobre las personas, cedieron y cayeron víctimas de los fake news. Hoy regresan conocedores de que fueron engañados, incluso por algunos de los que hoy están de vuelta.
Por supuesto que no hablamos de maravillas, sino de un proceso en marcha con muchos seguidores amigos y también enemigos como los que permanecen en silencio alienados al ejercicio del capital.
Es lo que sucede en Venezuela, un país rico en conciencia, historia y recursos, cuyos habitantes siguen están a la espera del bienestar anhelado, el mismo por el que clamó el Comandante Hugo Chávez, creador de la revolución bolivariana.
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