Hablar sin mentiras

 

 

El enano mental

no duerme

descansa en brazos

del imperio

Pedro Estacio

Dar como positivo lo que es negativo es lo que se entiende como mentir, es decir, dar por verdad lo que es sabido falso. Toda una minúscula teoría pero que por siglos se ha convertido en un gran lastre que ha maltratado a la humanidad y lo sigue haciendo, como sucede con el caso de los imperios y eso lo saben perfectamente quienes edificaron al imperio estadounidense, que se ha levantado pisoteando a la verdad y eliminando a quien argumenta en contra de la mentira.

Los imperios acostumbran a construir sus verdades. Lo hizo el imperio romano con sus deidades, el español con su absolutismo, el disfrazado imperio católico sobre Jesús de Nazareth y el también oculto imperio judío sobre la base del oro y otros recursos que constituyen la denominada riqueza física.

Y sobre los pilares de la mentira, pues cada uno ha armado su tinglado desde el cual opera y con la mentira a cuestas o su verdad -no la verdad de la mayoría- desarrollan cualquier actividad con la cual funcionan.

Una de las grandes mentiras de estos últimos tiempos -por no indicar mas de un siglo- y que es vendida como una verdad, es la del imperio estadounidense, que ha vendido como verdad, que para nosotros es mentira, la de sentirse predestinado para controlar al mundo, dirigirlo y orientarlo de acuerdo a sus necesidades.

El Libertador Bolívar siempre lo supo

El Libertador Simón Bolívar lo vislumbró, tuvo ese indicio cuando en carta a Patricio Campbell, encargado de negocios británicos en Washington refirió que EE.UU parecía predestinado por la providencia a plagar la América de miserias a nombre de la libertad. No se quedó callado, lo dijo. Por supuesto, el naciente imperio para aquella época siempre lo tuvo en la mira y ahora a sus seguidores.

Y sobre esa gigantesca mentira de sentirse predestinado por la providencia, las élites de ese país armaron el tinglado sobre el cual se levantó y que ahora comienza a padecer el desmoronamiento que han tenido todos los imperios y contra ello viene luchando.

Los lectores pueden consultar el libro del profesor Manuel Mariña titulado Imperialismo, Petróleo y Profecías y en la página 51 hasta la 55 apreciarán todas las intervenciones del Imperialismo estadounidense desde 1893 hasta el 2002. Y en esas intervenciones, con énfasis en los últimos 40 años, ha estado trabajando la Agencia Central de Inteligencia, CIA, de manera encubierta, en sus mas de 40 frentes, los cuales operan dentro y fuera de EE.UU.

¿Democracia disfrazada?

Y esa gran mentira, luego de la II guerra mundial y en la que el imperio intervino casi al final, una nueva visión de organización social comenzó a ser sutilmente delineada y muy disfrazada para dar la idea de una gran democracia con mucha justicia y equilibrio y con la participación de todas las naciones del mundo y por allí nacen la Organización de las Naciones Unidas, ONU, el Consejo de Seguridad y un sin fin de instancias como la Organización Internacional del Comercio,OIC, la Corte Internacional de La Haya, Organización Internacional del Trabajo, OIT, el Banco Mundial,BM, el Fondo Monetario Internacional, FMI, etc.

Ha sido vendida la idea -una inmensa mentira- de una gran red de organizaciones que permitirían que el mundo, es decir el planeta, marchara ordenadamente, en equilibrio, con mucha justicia y orden, donde nadie cometiera errores y todo estuviese bien, pero nunca fue así, simplemente fue tejida una telaraña en la que todos los caminos o posibilidades fueron controlados por el imperio sin que nadie dijese algo.

Y esa es la realidad actual

Así, existe un imperio, el de EE.UU con unos cuantos paises vasallos que cumplen ciegamente instrucciones y una élite imperial que se cree propietaria del planeta y que juzga y agrede a todos los que se oponen a sus planes. Es lo que tenemos actualmente y no puede ser negado. Y el ejemplo que ilustra esa barbaridad es la política de violentas sanciones, medidas ilegales, pisoteo de las soberanías, leyes y la moral de otros, así como los bloqueos empleados por el imperio, como el caso de Cuba, apoyada por mas de 180 naciones, pero que la élite imperial sen niega a reconocer.

Una historia real donde la primera víctima ha sido la verdad y el héroe la mentira del imperio estadounidense, como es la que hoy el mundo ve que ocurre en la llamada Ucrania. Para algunos, es la idea fascista que giraba alrededor y con Adolfo Hitler y que ha sobrevivido con nuevo disfraz y que insiste en controlar al planeta y seguir imponiendo un modelo de vasallaje muy adornado.