Pedro Estacio
Siempre será interesante revisar lo que escribió el profesor Ignacio de la Cruz en su libro Bolívar y su concepción del periodismo, porque nos permite reencontrarnos con el ejercicio de una profesión que siempre ha estado en primer plano, y hoy mas, cuando el ambiente de la comunicación e información está ensangrentado por ese negativo aval de las fake news.
“Bolívar -escribe el fallecido docente zuliano- , que conocía muy bien la historia, sabía del trascendental papel que había jugado la imprenta y el periodismo en los grandes procesos de la reforma, la revolución inglesa, la revolución francesa y en la independencia de los Estados Unidos”.
Es vital comprender que, como apuntó el catedrático, “Esa necesidad de ilustrarse no es otra cosa que la de estar informado: saber lo que está pasando y discernir sobre sus posibles consecuencias. En esta tarea se hermanan la tribuna y el periódico: se complementan, se refuerzan y los identifica un mismo lenguaje revolucionario, de igual trasfondo ideológico”.
Un buen punto, porque aquí está la gran diferencia de lo que se quiere vender como una opinión periodística, porque en el fondo de eso se trata con los fake news y el verdadero periodismo. Una cuestión es que el ciudadano, el individuo quiere, desea saber e interpreta lo que conoce y otra es intentar, obligar a que los demás crean lo que presuntamente acontece en el ambiente social.
Si bien en un principio mucha gente fue blanco de los fake news como sucedió en Brasil en donde lanzaron cientos de miles, a lo mejor millones, de noticias falsas del lado de Jair Bolsonaro con el fin de hacerse de la presidencia, hoy las cosas han cambiado porque las personas van aumentando su poder de conciencia y examinan muy bien los mensajes, al punto que muchas veces lo primero que dicen es ¡Eso es un fake news, es una mentira!
El Libertador estaba clarísimo en cuanto a la importancia de la imprenta y el profesor Ignacio de la Cruz lo asienta muy bien:
“Esclarecida conciencia tenía el Libertador sobre la importancia de la imprenta.Era un arma de devastadoras consecuencias psicológicas a su disposición. De allí su carta a Fernando Peñalver: Sobre todo mándeme Ud., de un modo u otro, la imprenta, que es tan útil como los pertrechos”.
La convicción de Simón Bolívar era grande sobre el poder de la imprenta y el periodismo. Y quizá manejó aquella idea de Napoleón Bonaparte quien presuntamente dijo que cuatro periódicos hacían mas daño que 100 mil hombres en un campo de batalla.
Cita el profesor Ignacio de la Cruz que “no hacía sus grandes campañas militares si no llevaba consigo una imprenta. No le bastaba la fundación de periódicos en tal o cual ciudad”.
La creencia del guerrero caraqueño en la imprenta y el periodismo fue tal que fundó el Correo del Orinoco, porque además de saber que los periódicos constituían una gran fuerza de apoyo en lo militar, también eran un gran portal para las luces de una nación.
La concepción que tuvo el Libertador Simón Bolívar sobre el periódico fue realmente futurista. Pensó al periódico como un educador mas, pero un educador de masas y de hecho, su visión estaba demasiado adelantada, muy futurista, porque hoy día, si revisamos bien las cosas, podemos apreciar que los medos de comunicación son realmente para grandes masas, grandes volúmenes de personas y sin fronteras pues llega, vía satélite a todas partes del planeta Tierra.
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